El pasado 5 de abril, el Doctor Juan Manuel Cano nos habló sobre la industrialización de Cerro Muriano y el numeroso público congregado en la sala Vimcorsa supo compensar su ágil narración con un sincero aplauso.
La Arqueología no se limita al pasado remoto, también estudia el reciente. La Industrialización supone un capítulo imprescindible para entender el mundo actual, como reveló el final de la exposición. El Cerro Muriano que hoy conocemos se conformó, a comienzos del siglo XX, gracias a la iniciativa inglesa en torno a la minería del cobre. Los intereses económicos de la especulación con la propiedad, la explotación de los yacimientos y su comercialización pronto dieron paso a otro tipo de factores como el transporte, las innovaciones técnicas, los trabajadores y sus formas de vida; en último extremo, al pueblo en cuanto a paisaje y a sentir.
En definitiva, el ponente ilustró la Arqueología Industrial desde lo más particular, microhistorias personales de las que incluso algún asistente era partícipe, hasta lo universal, pues este se inserta dentro de un movimiento global de control de los recursos.
El
conferenciante, Juan Manuel Cano, junto a Martin Pearce, descendiente de los
ingleses de Cerro Muriano
El público congregado en la Sala Vimcorsa para la ocasión
Rafael
Blanco y Juan Manuel Cano, momentos antes de iniciarse la interesante conferencia